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VECINOS DE LA VILLA ESPERANZA LLEGARON AL LÍMITE CON LAS CLOACAS Y EL PELIGRO PARA LA SALUD
Se reunieron con concejales y plantearon el crudo panorama.
Sierra Grande | Preocupados por la situación que les toca atravesar a los habitantes de los Módulos C2 en la Villa HiPaRSA, quienes padecen la emanación de aguas servidas, la acumulación de basura y la consiguiente contaminación ambiental, ayer se reunieron e iniciaron acciones para resolver definitivamente, el tema. 
Los vecinos solicitaron al presidente del Concejo Municipal, Carlos Negri “ayuda para poder solucionar o tramitar ante quien corresponda lo que hace tres años nos viene inquietando como vecinos: el tema cloacas de la Villa Esperanza, del módulo 1 al 8. Son aproximadamente 50 familias que viven en este barrio y sufrimos continuamente desbordes cloacales, contaminación, problemas de salud y bienestar en nuestras viviendas “, indicaron los vecinos.
Encabezados por los integrantes de la Junta Vecinal del barrio, Héctor Hinofuentes y Fabiana Sosa, se reunieron en el local donde funciona el comedor y hasta el lugar llegaron los concejales del Partido Vecinal Renacer, Judith Campero; del PJ, Liliana Gauna y de Cambia Sierra Grande, Nadia Arbaizar. Además, se sumó el presidente de Renacer, Guillermo Benitez.
En el encuentro, los vecinos contaron las dificultades que atraviesan como consecuencia de las roturas del sistema cloacal que no les permite ni abrir las ventanas, permanecer en un foco infeccioso de manera continua, contaminación de todos los espacios incluida la cancha de futbol lindante, afectación de las estructuras y del sistema eléctrico y humedad.
Los vecinos recorrieron junto a los ediles todo el tendido de la red cloacal, poniendo de manifiesto su preocupación y analizando posibles alternativas.
Esta no es la primera vez que los habitantes del barrio exponen la situación, ya que el año pasado analizaron junto a las autoridades de la Municipalidad de Sierra Grande, Salud Publica, Aguas Rionegrinas e HiPaRSA, la problemática.
En ese entonces, las partes evaluaron la gravedad del panorama, que pone en riesgo la salud de las familias que habitan el lugar, especialmente teniendo en cuenta que en el sector residen niños y niñas, que usan los espacios para juego y recreación.
El año pasado, caso se tornó preocupante tras conocerse un informe tras un relevamiento realizado en los módulos C2, luego de la realización de un análisis a un menor que presentó sintomatología y acudió a la guardia médica para su revisión. Se pudo constatar la presencia de la bacteria Shigella. La shigelosis puede ser provocada por contacto con aguas residuales o servidas.
En el relevamiento se observó el estado del sistema cloacal y las deficiencias que presentaba. También se pudo observar la emanación de aguas servidas, la acumulación de basura y la consiguiente contaminación ambiental.
Desde ese tiempo a esta parte el panorama no cambió y la situación reviste carácter de urgencia.
Fuente: Radio Libre – pidolapalabra.com.ar