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«EL PASADO ES EL SIMIENTE DE ESTA HISTORIA DE 203 AÑOS». Por Renzo Tamburrini

Hace mas de 200 años, hombres que creían en los ideales liberales, con un principio republicano, propusieron cambios profundos, rápidos, dinámicos pero drásticos, en una sociedad que no resistía por mas tiempo la dependencia con España.
La Revolución de 1810 fue un acontecimiento que, cuando se lo ve desde una perspectiva histórica, parece inevitable, pues las cosas ocurrieron de tal modo que un suceso semejante en esta parte de América era casi necesario”, señala en su Breve Historia de los Argentinos el historiador Félix Luna
Sin dudas, el mayor y mas trascendental cambio de la historia social, económica, política y jurídica de la Argentina. Al recorrer la recta histórica, es comprensible entonces, que con estos antecedentes, Latinoamerica haya forjado su historia con grandes revoluciones.
En 1810, en la Semana de Mayo, hubo un grupo de hombres que no se quedaron solo con la idea o las ganas, pensando en lo que podían hacer para cambiar. Los hombres de la revolución marcaron el mas férreo de los compromisos, poniendo en marcha un proyecto de emancipación continental.
La necesidad, la búsqueda de la independencia, no enfrentó a los españoles con los criollos, sino a los partidarios de la autoridad real con quienes querían un gobierno propio, que los represente y los incluya.
Así comenzó la construcción de la identidad de estos hombres tenaces, que no quisieron quedarse solo con lo que soñaban, sino que prefirieron armar la transformación, involucrarse para modificar la realidad engañosa en la que vivían.
Un movimiento de los que hoy llamaríamos político, en ese tiempo parecía escandaloso, pero era el empeño puesto un proceso de organización, un nuevo esquema impulsado por hombres valientes que decidieron derribar la barrera de las imposiciones, para brindarle a la Nación nuevas posibilidades.
Es necesario comprender cual fue el sentido de aquel movimiento gestado en 1810 y cuales fueron sus consecuencias en ese escenario real y complejo. Un cuadro de situación general que había que disolver para introducir cambios en la sociedad, provocar una nueva dinámica vinculada al primer gobierno patrio formado por hombres de distintas profesiones y nacionalidades, que revelados ponían en valor la defensa nacional, para romper con la dependencia de España.
Necesitaban comenzar a vivir y a protagonizar su propia historia con el fin de llegar al resultado mas esperado que era la Libertad.
Nada puede quedar afuera de la memoria. Es imposible no asociar aquellos tiempos a esta realidad, porque en esto ha devenido, porque ha sido escuela para las nuevas generaciones, porque el pasado es el simiente de esta historia que a 203 años, que con un bicentenario recién estrenado, nos deja la muestra cabal del vinculo entre los hombres y su patria, con todas las consecuencias afectivas y sociales que de el derivan.
La patria no es solo territorio, población o riqueza, es tradición, historia, sistema de vida y porvenir.
Es necesario el patriotismo, ese sentimiento que nos impulsa a amar, defender y servir a nuestra querida Argentina. El ser patriota es un deber que se traduce en adquirir conciencia de los problemas actuales y en poner de manifiesto una conducta dispuesta a servir, aun con el mayor de los sacrificios.
Decía Ortega y Gasset que hay dos maneras de patriotismo: “una es mirar la patria como la condensación del pasado y como el conjunto de las cosas gratas que el presente de la tierra en que nacemos, nos ofrece”, pero hay otra noción a decir del mismo autor y es “el conjunto de virtudes que faltó y falta a nuestra patria, lo que no hemos sido y tenemos que ser, so pena de sentirnos borrados del mapa. Por muy cumplida que sea la vida de un pueblo, tiene mucho que mejorar. Esa mejora de la patria esperan nuestros hijos, de nosotros para que su existencia sea menos dolorosa y mas llena de posibilidades”.
La mejora de la patria, la perfección de ella, es lo que dejaremos para nuestros hijos y por lo tanto siempre será la verdadera muestra de que tipo de responsabilidad hemos asumido.
Entendida así la patria, es el patriotismo pura acción sin descanso, suele ser duro y a veces penoso, pero siempre vale la pena porque el objetivo final es concretar la idea de mejorar la conciencia nacional. La patria siempre nos necesita, es una tarea a cumplir, no un problema a resolver. Es un deber.
Todos y cada uno de nuestros días se levanta de la faz de la tierra, una nueva y gloriosa Nación! Feliz día de la Patria Sierra Grande, feliz día de la patria amada Argentina!!!
*Renzo Tamburrini, Intendente Municipal,  Discurso del acto central 25 de Mayo de 2013
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