Icono del sitio Pido la Palabra

A UN AÑO DEL CAÓTICO 17 DE JUNIO

SIERRA GRANDE (NSG).- Hoy se cumple un año de un inolvidable domingo 17 de junio de 2012 donde hubo varios accidentes y un saldo triste para la ciudad. Heridos, dos patrulleros destruidos y la conmoción por la muerte de un hombre que generó una herida que no cierra.

Ese día al mediodía las sirenas empezaron a sonar con fuerza por un accidente de tránsito que había ocurrido en la ruta 3 con el choque de dos vehículos, varios heridos entre ellos un jovencito de Sierra Grande que viajaba con su abuelo y que su vida corrió peligro durante meses. Otra familia del sur presentaba golpes.

Rumbo a ese accidente iba un patrullero a toda velocidad, se desplazó por la ciudad pero terminó bajo las ruedas de un camión. Dos accidentes a la misma hora, difícil situación había para resolver. Dos policías muy graves fueros trasladados a Viedma y un patrullero quedó destruido.

Pero todo no terminó ahí, ya era demasiado para ese día del padre cuando cerca de las siete de la tarde otro accidente cerca de la ruta entre un jeep y una moto.

En el Jeep iba el Zapallo Pil, en la moto su sobrino, el ese momento hubo entredichos entre Pil y la policía y mientras era llevado detenido a la comisaría caminando cayó y a los pocos minutos murió en la calle.

Varios testigos aseguraron que los policías que lo llevaban, entre ellos el subcomisario de turno, lo habían reprimido.

La ira se apoderó rápidamente de los vecinos, especialmente amigos del conocido Zapallo. El caos reinó en el hospital donde se concentraron decenas de vecinos, adentro estaba el cuerpo sin vida del empleado municipal y el desconsuelo desbordó en bronca contra los policías que estaba custodiando el nosocomio.

El caso fue tal que se vivieron escenas de violencia, nervios, corridas y hasta un patrullero fue quemado casi en la puerta de la guardia, esa notricia dio vuelta los medios nacionales al día siguiente.

Ese día quedará para la historia. Los heridos algunos se recuperan lentamente, los patrulleros destruidos no fueron restituidos aún, hubo policías que fueron traslados de inmediatos y una vida por la que familiares y amigos piden justicia aún.

 

Salir de la versión móvil