Sierra Grande | En respuesta a los dichos del militante radical Rodolfo Ferrufino, quien la semana pasada manifestó en declaraciones a Radio Libre que “el Comité Local de la UCR está en crisis” y exigió su apertura inmediata junto con la convocatoria a elecciones, la presidenta del comité de Sierra Grande, Carmen Rodríguez, emitió un comunicado en el que desmiente categóricamente sus afirmaciones y pone en tela de juicio su autoridad moral y política para realizar semejante reclamo.
Rodríguez tildó de “falta de vergüenza” el hecho de que Ferrufino “desmerezca el trabajo sostenido y comprometido de esta conducción”, la cual –según afirmó– ha cumplido con todas las instancias partidarias exigidas. “Usted sólo elige hablar con ligereza de lo que, a su criterio, no se hizo, omitiendo las múltiples oportunidades en las que fue personalmente invitado a participar y construir, y decidió no hacerlo”, señaló.
Respecto a la fallida integración de una lista de unidad, Rodríguez fue tajante: “La convocatoria fue realizada desde el Comité Central y reiterada por mí en persona. Su respuesta fue negativa. Luego, a dos días del cierre de listas, decidieron bajarse sin explicación formal, lo cual obligó al Comité a conformar una propuesta institucional para evitar la acefalía”.
En ese sentido, defendió el accionar de la actual conducción y apuntó contra lo que denominó como un “circo mediático”: “Resulta muy fácil hablar en los medios, sembrar dudas desde afuera, pero lo verdaderamente valioso y honesto es dar la cara y debatir dentro del espacio correspondiente”.
Rodríguez finalizó su respuesta con una invitación directa: “Lo invito públicamente a acercarse al Comité, afiliarse y debatir cara a cara, con respeto y argumentos, como corresponde en cualquier partido democrático y republicano. Las puertas están abiertas para el militante que quiere construir. No aceptamos lecciones de quienes nunca se comprometieron”.
Así, el radicalismo de Sierra Grande busca cerrar filas frente a lo que consideran una crítica infundada, reafirmando que la militancia y la institucionalidad se sostienen con hechos, presencia y trabajo constante, no con declaraciones radiales oportunistas.
Por redacción de Pido la Palabra.